Normalmente las ciudades de más de varios miles de
habitantes (bueno, también cientos) ofrecen cobertura ADSL, por lo que es
posible acceder a Internet a través de banda ancha. Además, en los grandes
núcleos de población también es posible contratar servicios de fibra, lo que
aumenta notablemente la velocidad de navegación, descarga y subida, y también
los servicios asociados que se pueden contratar. No obstante, ¿qué ocurre
cuando en nuestro lugar de residencia no llega ni el ADSL ni la fibra?
Aunque no las conozcáis, existen varias alternativas que
permiten disfrutar de banda ancha en el hogar sin necesidad de contratar
algunas de las tecnologías anteriores. El satélite o las redes móviles son
algunas de las mejores opciones que llegan a prácticamente todos los rincones
de España y, que hoy, procedemos a explicar para que no os quedéis sin vuestro
acceso a Internet.
Redes móviles: el 3G
es más que suficiente para navegar
Muchas compañías de telefonía móvil ya ofrecen la
posibilidad de navegar a través de redes móviles en el hogar a través de
tarifas especiales que solo están destinadas al consumo de datos, teniendo en
cuenta el gran avance que están mostrando en todo el territorio español.
Movistar o Amena son dos de los operadores que ofrecen estos servicios tan
especiales y que resultan realmente útil, sobre todo cuando se trata de una
casa alejada del núcleo urbano.
Aunque con conectividad 3G es más que suficiente para
navegar por Internet, la mayoría de tarifas ya incluyen la posibilidad de
disfrutar de la última tecnología, el 4G, en el caso de que la cobertura exista
en ese lugar. Eso sí, tiene un gran inconveniente, la limitación de descarga de
datos, es decir, que no podremos ver muchas películas ni descargar a través de
programas P2P ya que, en ese caso, existe un límite muy inferior al de la
propia tarifa.
WiMax
Normalmente necesita una instalación “más compleja” ya que
es necesario montar una antena en el hogar que permita recibir las ondas de
radio que permiten conectarnos a Internet además del propio router. No obstante,
cuenta con varias ventajas y es que su velocidad de navegación, normalmente, es
más estable y amplia, sobre todo en zonas de alta cobertura. Además, es posible
disponer de telefonía fija, existiendo diversas alternativas que se ajustan a
prácticamente cualquier usuario.
Internet por satélite
En este caso también se necesita una antena parabólica que
pueda recibir toda la información de los satélites que rodean el planeta,
además de claro está el router que permite recibir y procesar todos los
paquetes de datos. Este tipo de tecnología se utiliza mucho, por ejemplo, a la
hora de viajar en transporte público como autobuses o trenes, por lo que ya se
conoce la alta latencia a la que estamos expuestos –esto significa que los
tiempos de respuesta son más altos, es decir, que las páginas web tardarán más
en cargarse-.
No obstante, en el caso de un hogar, no existe movimiento,
por lo que la cobertura es más estable, existiendo varias tarifas realmente
interesantes y que ofrecen una alta velocidad de descarga, incluso mayor que la
del propio ADSL en ciertos momentos y lugares.
(Fuente: www.cincodias.com)