Resulta de
lo más revelador que uno de los dispositivos que más atención ha despertado en
el Mobile World Congress es un teléfono que tendrá un precio aproximado de 122
dólares. Más elocuente aún es que se trate de un Nokia que utiliza el sistema
operativo Android, propiedad de Google, rival de Microsoft, que pronto
controlará Nokia.
Pero es
probable que los usuarios de smartphones de mercados maduros como el
estadounidense nunca lleguen a probarlo. El Nokia X está pensado para países
como India, o para regiones como América Latina, África y Oriente Medio, donde
los consumidores tienen menos poder adquisitivo.
Es probable
que Microsoft se sienta un poco desconcertada por la noticia, pero con ella
quedan patentes las limitadas opciones que tienen los fabricantes de
smartphones que no son Apple, Google o Samsung. Las plataformas Android y iOS
representaron casi el 96% de todos los smartphones que se vendieron el año
pasado, según IDC.
Samsung y
Apple se llevaron juntas un 46% de la cuota de ventas globales. El resto
registraron ventas de un solo dígito. Es importante tener en cuenta que los
smartphones no tienen nada que ver con el mercado de ordenadores que Microsoft
llegó a dominar con Windows.
Comparados
con los ordenadores, los smartphones tienen un ciclo de sustitución mucho más
breve y las empresas, por lo general, permiten a los empleados elegir el modelo
que quieran. Por tanto, los clientes no son tan fieles y de hecho suelen
cambiarse a nuevos dispositivos y plataformas.
En este
sentido, una apuesta como la de Microsoft y Nokia no tiene por qué ser un
fracaso. Microsoft intentará vender a los usuarios que se hagan con el Nokia X
su software y sus servicios, y, a la larga, intentarán convertirlo en un
Windows Phone. Detrás de las últimas incursiones, como las de Lenovo y Asus
está la dinámica del mercado de smartphones. No obstante, la época del dinero
fácil se acabó y ahora es mucho más difícil obtener beneficios. IDC prevé que
el mercado de smartphones crezca a un ritmo del 18,4% anual hasta 2017, después
de registrar una media del 46,5% en los últimos tres años.
Por otra
parte, parece que el precio de venta medio de los móviles no superará los 265
dólares en 2017(lo que representa un descenso del 21% con respecto a 2013),
según IDC.
Apple y
Samsung siguen siendo las empresas más rentables, dada su capacidad para
obtener los mayores subsidios de las operadoras de telefonía móvil. Las ventas
de las últimas empresas que han entrado al mercado dependerán más del precio
que de las características de sus dispositivos.
Lea el artículo original publicado en The
Wall Street Journal For Smartphones, Price Is the New X Factor,
(Fuente: www.expansion.com)