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lunes, 7 de julio de 2014

Vodafone prepara ya la oferta conjunta con Ono



La Comisión Europea ha autorizado este miércoles sin condiciones la compra de la firma española de cable Ono por parte de la operadora británica Vodafone tras constatar que la operación no plantea problemas de competencia en el mercado comunitario.

Tras esta autorización, se estima que la operación se cerrará en un plazo de dos o tres semanas, según apuntaron en fuentes de Vodafone. Una vez se complete la transacción, los clientes de Ono y Vodafone seguirán disfrutando de los mismos servicios que tenían contratados hasta la fecha y gozarán de las mismas líneas de soporte, servicio e información que venían utilizando habitualmente.



Esto significa que en el corto plazo no se producirán cambios en la organización. En paralelo, equipos de ambas compañías trabajarán en el diseño de una oferta comercial conjunta. "El objetivo es ofrecer a los clientes, cuanto antes, los servicios más completos de comunicaciones convergentes -voz, Internet y TV- sobre la infraestructura 4G de Vodafone, la red de fibra de Ono y la que está desplegando Vodafone", señalan las mismas fuentes.

La investigación de Bruselas ha puesto de relieve que las actividades de las dos empresas son "en gran medida complementarias". Ono opera principalmente en el sector de las telecomunicaciones fijas, mientras que Vodafone lo hace sobre todo en el de las móviles. Ono también presta servicios de televisión de pago, pero Vodafone, no.

En cuanto a los solapamientos que existen entre las actividades de las dos empresas en los mercados de telecomunicaciones fijas y móviles, la Comisión considera que éstos son "limitados" y que la entidad resultante de la concentración tendrá que seguir enfrentándose a rivales importantes como Telefónica, Orange y Jazztel.

La operación da lugar también a algunas relaciones verticales y de conglomerado en los mercados de las telecomunicaciones fijas y móviles en España, en particular en relación con la prestación de servicios múltiples incorporados.

Sin embargo, la investigación de la Comisión reveló que la entidad fusionada no estará en condiciones de excluir operadores fijos o móviles de los mercados de servicios múltiples, debido a la disponibilidad de operadores alternativos y a las obligaciones reglamentarias en relación con el acceso al por mayor a servicios móviles y fijo. Por consiguiente, la Comisión ha llegado a la conclusión de que la operación no obstaculizará de forma significativa la competencia efectiva en España.

La adquisición se notificó a Bruselas el 23 mayo 2014. Vodafone y Ono llegaron a un acuerdo preliminar de compra el pasado marzo. Con la incorporación del negocio de la firma española, Vodafone busca posicionarse en el mercado de la banda ancha ultrarrápida y hacer frente a la oferta de fibra de Telefónica.
(Fuente: www.elpais.com)